¿La carne de ternera engorda?
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¿La carne de ternera engorda?

Si te preguntas si la carne de ternera engorda, la respuesta rápida es que no, de hecho es una de las carnes con un contenido en grasa más bajo.

Además es una fuente rica en nutrientes, pero su valor calórico varía dependiendo del corte.

 

¿La carne de ternera engorda? los números no mienten

En promedio, una porción de 100 gramos de carne de ternera contiene alrededor de 5,5% de grasa, unas 250 calorías. Este valor puede cambiar según la cantidad de grasa presente en el corte específico de la carne.

Comparación con otros tipos de carne

Comparando la carne de ternera con otros tipos de carne, como el pollo o el cerdo, se observa que la carne de ternera suele tener más calorías que el pollo, pero menos que algunos cortes de cerdo

Por ejemplo, el pollo sin piel tiene alrededor de 165 calorías por 100 gramos, mientras que algunos cortes grasos de cerdo pueden superar las 300 calorías por la misma cantidad.

Esta comparación es útil para quienes buscan gestionar su ingesta calórica de manera más precisa.

Contenido de grasa en la carne de ternera

El contenido de grasa en la carne de ternera también es un factor crucial que afecta su valor calórico. Los cortes más grasos tendrán un mayor contenido calórico debido a la mayor cantidad de lípidos.

Grasas saturadas vs. grasas no saturadas

En la carne de ternera, encontramos tanto grasas saturadas como no saturadas. Las grasas saturadas, presentes en mayor cantidad en cortes más grasos, están asociadas a un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares si se consumen en exceso

Por otro lado, las grasas no saturadas son más saludables y se encuentran en menores cantidades en la carne de ternera. 

Elegir cortes magros puede ayudar a reducir la ingesta de grasas saturadas y calorías totales.

Porciones recomendadas y su impacto en el peso

Para mantener un peso saludable, es importante controlar las porciones de carne de ternera. Se recomienda consumir porciones de aproximadamente 85-100 gramos por comida. 

Un consumo moderado y equilibrado de carne de ternera, combinado con una dieta rica en verduras y frutas, puede ayudar a gestionar el peso de manera efectiva. 

Evitar porciones grandes y optar por cortes magros puede reducir la ingesta calórica y de grasa, ayudando a prevenir el aumento de peso.

 

Beneficios nutricionales de la carne de ternera

Proteínas y su papel en la dieta

La carne de ternera es una excelente fuente de proteínas de alta calidad. Las proteínas son esenciales para la construcción y reparación de tejidos en el cuerpo, incluyendo músculos, piel y órganos. 

Además, las proteínas juegan un papel crucial en la producción de enzimas y hormonas

Una porción de 100 gramos de carne de ternera contiene aproximadamente 20-25 gramos de proteína, lo que la convierte en una opción ideal para satisfacer las necesidades diarias de este macronutriente.

Vitaminas y minerales esenciales

Incluir carne de ternera en la dieta proporciona estos beneficios nutricionales esenciales, ayudando a mantener una buena salud general y a apoyar funciones corporales cruciales.

Hierro

El hierro presente en la carne de ternera es del tipo hemo, que se absorbe más fácilmente que el hierro no hemo encontrado en fuentes vegetales. El hierro es fundamental para la producción de hemoglobina, que transporta oxígeno en la sangre. 

Consumir carne de ternera ayuda a prevenir la anemia y a mantener niveles óptimos de energía.

Zinc

La carne de ternera es también una rica fuente de zinc. Este mineral es vital para el sistema inmunológico, la síntesis de proteínas y la reparación del ADN. 

El zinc ayuda a mantener el sistema inmunológico fuerte, promoviendo la curación de heridas y el funcionamiento adecuado del sentido del gusto y el olfato.

Vitaminas del grupo B

Las vitaminas del grupo B presentes en la carne de ternera, especialmente B12, B6 y niacina, son cruciales para el metabolismo energético y el funcionamiento del sistema nervioso

La vitamina B12, en particular, es importante para la formación de glóbulos rojos y la función neurológica, y se encuentra en abundancia en la carne de ternera. 

La vitamina B6 y la niacina contribuyen al metabolismo de las proteínas y los carbohidratos, facilitando la obtención de energía de los alimentos consumidos.

 

Factores que afectan el contenido calórico de la carne de ternera

Tipo de corte

Elegir cortes magros es una forma efectiva de reducir la ingesta calórica sin sacrificar el aporte proteico.

Cortes magros vs. cortes grasos

El tipo de corte es uno de los principales factores que determinan el contenido calórico de la carne de ternera.

Los cortes magros, como el lomo y el solomillo, contienen menos grasa y, por lo tanto, menos calorías. Por ejemplo, una porción de 100 gramos de solomillo puede tener alrededor de 150-200 calorías. 

En contraste, los cortes grasos, como la costilla y el entrecot, tienen un mayor contenido de grasa intramuscular, lo que aumenta su valor calórico. Estos cortes pueden contener hasta 300 calorías por cada 100 gramos.

Método de cocinado

Elegir el corte adecuado y el método de cocción apropiado son estrategias efectivas para controlar el contenido calórico de la carne de ternera y mantener una dieta equilibrada.

Asado

El asado es un método de cocinado que puede afectar significativamente el contenido calórico de la carne de ternera. Asar la carne permite que parte de la grasa se derrita y se drene, reduciendo el contenido calórico total

Además, no requiere la adición de aceites, lo que ayuda a mantener la carne más saludable. 

Sin embargo, es importante no excederse en el tiempo de cocción para evitar que la carne se seque.

A la parrilla

Cocinar a la parrilla es otra técnica popular que puede ayudar a reducir las calorías de la carne de ternera. La grasa se derrite y gotea a través de la parrilla, lo que disminuye el contenido calórico

Además, el sabor ahumado que se obtiene al asar a la parrilla puede mejorar la palatabilidad de los cortes más magros. Es crucial controlar el tiempo y la temperatura para evitar que la carne se queme, lo que puede producir compuestos no saludables.

Frito

Freír la carne de ternera, aunque es delicioso, aumenta significativamente el contenido calórico debido a la absorción de aceite durante la cocción. 

Una porción de carne frita puede contener casi el doble de calorías en comparación con los métodos de cocción más saludables. Freír añade grasas saturadas y trans a la carne, lo que puede ser perjudicial para la salud cardiovascular. 

Para quienes buscan mantener una dieta baja en calorías, es mejor evitar este método de cocción.

 

Mitos y realidades sobre la carne de ternera y el aumento de peso

Desmitificar estos conceptos erróneos sobre la carne de ternera puede ayudar a las personas a tomar decisiones informadas sobre su dieta y a disfrutar de los beneficios nutricionales de este alimento sin preocupaciones infundadas sobre el aumento de peso.

Mito: Comer carne de ternera siempre lleva aumento de peso

Realidad: Comer carne de ternera no necesariamente lleva al aumento de peso. El aumento de peso está relacionado con el consumo de calorías en exceso y un desequilibrio entre la ingesta calórica y el gasto energético. 

La carne de ternera, especialmente los cortes magros, puede formar parte de una dieta equilibrada y saludable sin causar aumento de peso. Es crucial controlar las porciones y combinar la carne con otros alimentos nutritivos.

Mito: Toda la carne de ternera en alta en grasas y calorías

Realidad: No toda la carne de ternera es alta en grasas y calorías. Existen cortes magros, como el solomillo y el lomo, que son bajos en grasa y calorías. Estos cortes pueden proporcionar proteínas de alta calidad y nutrientes esenciales sin un exceso de calorías. 

Elegir cortes magros y prepararlos con métodos de cocción saludables puede ayudar a mantener una dieta baja en grasas.

Mito: La carne de ternera es menos saludable que otras fuentes de proteínas

Realidad: La carne de ternera es una excelente fuente de proteínas, vitaminas y minerales esenciales, como el hierro y el zinc. 

Comparada con otras fuentes de proteínas, la carne de ternera ofrece beneficios únicos debido a su alto contenido en nutrientes biodisponibles. La clave es consumirla con moderación y elegir cortes magros para maximizar los beneficios para la salud.

Mito: Es mejor evitar la carne de ternera para perder peso

Realidad: No es necesario evitar la carne de ternera para perder peso. Una dieta equilibrada que incluya porciones adecuadas de carne de ternera magra puede ser efectiva para la pérdida de peso. 

La proteína de alta calidad en la carne de ternera ayuda a mantener la masa muscular y puede aumentar la sensación de saciedad, lo que puede ayudar a controlar el apetito y reducir la ingesta total de calorías.

Mito: La carne de ternera no es compatible con una dieta saludable

Realidad: La carne de ternera puede ser parte de una dieta saludable. Incluir carne de ternera magra en una dieta equilibrada puede proporcionar nutrientes esenciales que son difíciles de obtener en las mismas cantidades de otras fuentes. 

Además, la carne de ternera puede ser parte de una dieta alimenticia variada que incluya frutas, verduras, cereales enteros y legumbres.

Mito: Cocinar carne de ternera de manera saludable es dificil

Realidad: Cocinar carne de ternera de manera saludable no es difícil. Métodos de cocción como asar al horno o a la brasa, o cocinar al vapor son opciones saludables que no añaden calorías adicionales. Además, marinar la carne con hierbas y especias en lugar de salsas altas en calorías puede mejorar el sabor sin añadir grasa extra.